Córdoba entera se echó a la calle para festejar ese logro. En ese grupo también se encontraban el Pontevedra y el Córdoba que se enfrentan entre ellos. Con este ascenso, el Córdoba comenzó un ciclo de 14 temporadas consecutivas en Segunda División B, convirtiéndose en un clásico en la categoría de bronce. En la temporada 90-91 acabó 3º en Liga, pero en la liguilla por el ascenso quedó último sumando únicamente dos empates.